Cuando estoy aburrido a la noche siempre me pongo a pensar qué inventos puedo crear para hacerme millonario. Ni se imaginan la cantidad de cosas que pasaron por mi cabeza. Pensé en coches voladores, tostadoras que también unten manteca, juguetes para ancianos, muñecas inflables con personalidad, y miles de cosas más. Obviamente, ninguna de estas cosas era lo suficientemente buena como para salir al mercado.
No sé qué es lo que me falta, pero estoy seguro de que carezco de ese gen que me puede hacer un gran inventor (vieron que ahora todo tiene que ver con los genes…). No importa, yo voy a seguir tratando, porque seguramente algún día se me cruze por la cabeza una idea como ésta:
Sí, es real lo que están viendo. Es, sin dudas, la máquina de juegos más maravillosa de todos los tiempos. Es la Japanese Boob Claw Machine, y lo digo en inglés para que tenga un toque más serio, porque si lo dijera en español estoy seguro de que se reirían. Pero bueno, me voy a animar: es la máquina para agarrar tetas.
Pero no se pongan contentos, porque no son pechos de verdad. No sé de qué material son pero parecen tener una textura muy real, ¿no? No me imagino caminando con mis chicos por un centro comercial y encontrar, al lado de los Winnie Pooh, una montaña de tetas.
Definitivamente quiero cruzarme con esa máquina y ganar mi propia teta. La pondría en el living de mi casa como trofeo de guerra.
Vía | Gizmodo
