La Navidad de acerca y llega el momento de decorar el hogar, las habitaciones, la puerta, el árbol… que aburrido, para muchos, ¿no? Así es que de repente has decidido que vas a decorar toda la casa con adornos navideños graciosos. Los adornos más ridículos y extraños que podamos encontrar, a fin de que nuestras visitas no se maravillen de lo tradicional que es nuestra decoración navideña, sino más bien lo contrario, que se sorprendan de nuestros adornos de navidad, que se rían, que se diviertan, que les parezcan ingeniosos. Así que aquí van algunas ideas desde Inventos Absurdos.
Adornos de navidad graciosos
El fin de estos adornos que hemos seleccionado es divertir y hacer reír a nuestros invitados. Nada más que una buena y sana diversión a costa de las tradiciones navideñas.
Que va, que con esta decoración de baño no muchos van a querer usarlo, mejor, menos para limpiar tras las fiestas.
Que no falta el que se divierte a costa de los pobres Rodolfo y Juguetón, los renos de Papá Noel, que al parecer… se divierten de formas extrañas.
Para hacer reír un poco, qué mejor que Papá Noel mostrando el trasero, ¿no?
Adornos de navidad ingeniosos
No sólo se trata de ser un decorador navideño divertido, también queremos ser ingeniosos, así que aquí van algunas ideas para que sorprendamos a nuestros amigos e invitados con adornos navideños ingeniosos que los hagan pensar, y tal vez reír un poco. Quién sabe, tal vez los hagamos filosofar un poco y todo, y termine una buena conversación gracias a nuestros ingeniosos adornos navideños.
A ver, ¿eso es lo que creo? Vamos, que más de uno se lo quedará mirando, a este gracioso adorno, y les dará vergüenza preguntar. Los dejaremos con la duda, y con la idea de si es su mente extraña la que da formas escatológicas a los adornos, o realmente era.
Si quieres pasar por un ñoño amante de la ciencia ficción, qué mejor que estos adornos navideños de Star Trek.
O vamos con la contra, y decoremos con Star Wars.
Con este adorno de aquí debajo podemos crear toda una serie de discusiones, de si queremos volar por los aires toda la decoración navideña, de si odiamos las fiestas y queremos destruir ese espíritu navideño que tanto atrae a los consumistas… o simplemente reírnos de: “mira, una granada en el árbol de navidad“.
